Érase una vez, durante una guerra civil en la época feudal, un pequeño poblado en el que vivía un maestro zen. Un día, llegó a ellos la noticia de que un temible general se dirigía en su dirección para invadir y tomar la zona. El día anterior a la llegada del ejército toda la aldea huyó, con la excepción del anciano maestro. Cuando llegó el general, tras encontrar la aldea prácticamente desierta y sabiendo de la existencia del anciano, ordenó que el maestro zen se presente ante él, pero este no lo hizo.
El general se dirigió rápidamente hacia el templo donde el maestro descansaba. Furioso, el general sacó su espada y se la acercó a la cara, gritándole que si no se daba cuenta de que estaba simplemente parado delante de quien podría atravesarle en un instante. Con total tranquilidad, el anciano maestro le contestó que precisamente el general estaba ante alguien que podía ser atravesado en un instante. El general, sorprendido y confuso, terminó haciéndole una reverencia y marchándose del lugar.
WOW QUE VALIENTE EL MAESTRO PERO QUE BUEN AUTOCONTROL EMOCIONAL Y VALOR DE TENER LA CAPACIDAD DE MANTENERSE SERENO ASOOO QUE TAL SI ZAZ LE ATRAVIESA LA ESPADA, NO CUALQUIERA POSEE ESE AUTOCONTROL xoxo YO PARECERÍA GELATINA DE MIEDO jajajajaja morí de risa. LA CUESTIÓN ES QUE EN CUALQUIER MOMENTO NOS PUEDEN PASAR COSAS PARECIDAS Y PERTURBARNOS ANTE ELLO NO NOS CONDUCE A NADA BUENO Y SIEMPRE MANTENER LA CALMA, GRACIAS MIL POR SUS APRECIABLES VISITAS, DEJO UN ENORME ABRAZO CON MUCHO CARIÑO, SU SIEMPRE AMIGA MEXICANA_______Kimera
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